28/5/08

Nadadas

Menuda salida la del domingo. Digna de recordar y de ser contada. No voy a citar nombres de los que se bañaron o abandonaron el río porque no quiero romper el secreto profesional que se establece en el río.
El domingo fue un día raro. Nos juntamos un grupo de 18 piragüistas (si mal no recuerdo) y hasta que decidimos a qué río ir, almorzamos en Liédena. Por fin nos embarcamos a la una pasadas (y habíamos quedado a las 9...) Nos aventuramos a bajar la Foz de Binies y a terminar en un tramo desconocido: llegamos hasta la panadería que queda al lado de Berdún.
Pero antes de entrar en el río, ya hicimos de las nuestras: tuvimos que empujar las furgonetas que estaban metidas en un barrizal. Fue entretenido, Miguel y el Canario acabaron llenos de barro, como si hubieran peleado en barro cual griegos. La cara de Ana pensando en su pobre furgoneta era un poema...
Bueno, al tema. El Veral ya iba crecidito cuando empezamos a bajar. Creo que en las 5 horas que estuvimos, pasamos por 3 tormentas diferentes y el caudal subió unos 30 cm. Según el medidor. El río seguía creciendo y creciendo y las bañadas de los piragüistas fueron a más. Por el camino nos abandonaron 4 magníficos piragüistas y se encargaron de buscar un sitio para descargar las piraguas y hacer los porteos de las furgonetas. Creo que tuvieron mucho mérito, se calaron hasta los huesos durante más de 3 horas y nos esperaron pacientemente.
El río estaba muy bonito aunque, sinceramente, creo que no o disfrutamos del todo. Como se suele decir, algunos teníamos el “culo prieto”. Hubo momentos de tensión y complicación. Cuando alguien se volcaba, el río arrastraba rápidamente la piragua, había pocas pozas que dieran un descanso, las orillas estaban llenas de ramas por lo que embarcar de nuevo después de una nadada era bastante difícil. Los stops eran pequeños y había que agarrarse con mucha habilidad a las ramas.
Si mal no recuerdo, el río se tragó literalmente 3 palas!!! Simplemente desaparecieron. Otra pala quedó herida y las piraguas se llevaron numerosos golpes.
Otro momento crítico fue la bajada de la presa. Rober y compañía demostraron su habilidad para rescatar un piragua enganchada en el rebufo de la presa y nadie salió herido. El baño accidental de la presa se quedó en un susto.
Pero lo peor estaba por llegar. No paramos el puente de Binies, donde normalmente acabamos nuestra travesía, sino que continuamos hasta la panadería. Ese tramo del río fue como hacer un slalom. Además de las curvas del propio río, había que sortear ramas y troncos (bien grandes). En dos ocasiones porteamos un tramo del río. Creíamos que ese último tramo iba a ser más corto pero no. Una curva tas otra, tras otra… y no llegábamos.
Nuestra alegría al ver el puente donde teníamos que terminar fue bastante grande. Pero aún teníamos que pasar una prueba más: la gymkhana.
Al desembarcar en la orilla, tuvimos que subir con la piragua al hombro hasta la carretera por pleno monte. Volver a esquivar troncos caídos, apartar ramas y contar todas las peripecias.
Después de esto, hicimos una comida-merienda-cena de pie en una incesante lluvia. El pan nos supo a gloria, así como los mejillones, el bonito y la trenza que siempre trae Mikel.
En resumen, fue un gran domingo.

Los piragüistas intrépidos:

Brother / Jesús / JuanPe

Rober / Itziar / Canario

Iñaki (Sobri) / Liam / Edu

Txus / Ander / JuanMa

Javi / Iñaki / Ana

Miguel / Mikel / Silvia

Y Txaro, que vino de apoyo moral

23/5/08

Día de luto

Iñaki Ochoa de Olza ha fallecido a las 8.45 horas (12.30 en Nepal) de esta mañana en la pared sur del Annapurna. Ha ocurrido después de permanecer cinco noches a 7.400 metros de altitud en estado grave afectado por una lesión cerebral complicada por otra pulmonar. Así lo ha confirmado a Efe amigos del alpinista. (Informa Diario de Navarra y as.com)


"Echaremos de menos tus increíbles charlas"

13/5/08

Canal de aguas bravas en Zaragoza

El otro día me llegó un email de Javi con un video muy interesante. Para la expo de Zaragoza se ha construido un canal artificial de aguas bravas. Creo que nos podríamos pasar a probarlo, ¿no?